Esto no lo sabe casi nadie.
Este verano tuve que pasar por quirófano de urgencias. Cuando estaba en la camilla esperando a entrar, recordé que la semana anterior me habían contado una historia de una persona joven y en buena salud que tuvo una operación rutinaria y murió. Me entró el pánico.
No sé si esto se basa en ciencia o en una leyenda, pero he escuchado que la gente que entra en quirófano con pensamientos negativos tiene una más alta probabilidad de morir durante la operación o quedarse en coma.
No sé si esto se basa en ciencia o en una leyenda, pero he escuchado que la gente que entra en quirófano con pensamientos negativos tiene una más alta probabilidad de morir durante la operación o quedarse en coma. Por suerte no he tenido muchas operaciones en mi vida, y antes de que me pongan el gas siempre intento pensar en algo positivo. Además también pienso en la primera mitad del refrán «tiran más dos tetas, que dos carretas» porque he visto la película Planta 4ª hasta la saciedad. No es por irme del tema pero si no la conoces, ves a verla por favor.
Como iba diciendo, en cuanto recordé esa historia macabra que me habían contado, empecé a ponerme muy nerviosa y tener otros pensamientos similares. La ley de la atracción, lo llaman. Si estás pensando en cosas negativas, tu cerebro te ofrece más imágenes por el estilo. Salir del círculo vicioso de una línea de pensamiento es algo muy difícil y que me ha costado años de trabajo personal, de lecturas, de terapia y de aprendizaje doloroso. Hoy voy a compartir contigo lo que mejor me funciona y que puse en práctica en ese momento de ansiedad en la camilla a punto de ser llevada a la sala de operaciones. No tenía nada conmigo, solamente yo y el poder de mi mente.
No tenía nada conmigo, solamente yo y el poder de mi mente.
Simplemente empecé a darle a mi cerebro otras imágenes que me ponen de buen humor. Los llamo mis porqués.
El primer paso es darme cuenta de lo que estoy haciendo y decirme que esto lo estoy haciendo de manera voluntaria. Me han contado una historia, pero yo soy quien elige ponerla al frente de mis pensamientos. Una vez lo entiendo y lo acepto (esto con la práctica cada vez se hace más fácil y rápido) me digo que de igual manera puedo elegir pensar en algo que me hace feliz. Mis porqués. Imagina la galería de fotos de tu móvil. Tienes fotos de estar con amigos, con familia, de vacaciones, riendo, comiendo, disfrutando de tu tiempo libre. Así son mis porqués, y los divido entre memorias y eventos futuros. Las memorias son aquellos recuerdos bonitos, agradables, divertidos, que me sacan una sonrisa y me ponen de buen humor. Los eventos futuros son aquellos sueños que visualizo a menudo (más sobre este tema otro día si quieres) y que estoy trabajando por cumplir. He creado esta galería mental que es como un archivo que siempre puedo visitar. Y lo mejor de todo es que cuando visito la primera imagen, ahora que tengo mucha práctica, las demás vienen sin que me tenga que esforzar.
Al principio cuesta, pero como todo en esta vida, es cuestión de crear el hábito. Y un hábito se crea en 21 días, así que te propongo lo siguiente: a partir de hoy y durante 21 días, ponte una alarma para practicar este ejercicio de 3 a 5 minutos diarios. Puedes hacerlo mientras estás en el váter, así que no me digas que no tienes tiempo! Al final de este reto me cuentas qué tal ha ido, cómo te has sentido, qué ha cambiado para ti. Ya estoy deseando conocer tus resultados!