El otoño ha llegado! Y con él las hojas caídas, días lluviosos, días más cortos y noches más largas, y CALABAZAS POR TODAS PARTES! Siempre he sentido una especie de fascinación por las calabazas, ya que no eran muy comunes donde me crié. De hecho, recuerdo que en Halloween tallábamos melones en lugar de calabazas porque eran muy difíciles de encontrar – y muy caras -. El mérito de esa idea va para mi madre, que siempre ha tenido una habilidad especial para encontrar entretenimiento creativo para los niños en las fiestas y cumpleaños. Y a pesar de que amo el verano – soy hija del verano, nacida a finales de Julio en el mediterráneo – me vuelvo loca en cuanto veo las primeras señales del otoño en el supermercado!
Así que aquí tenéis: mi primera receta otoñal (y las que quedan por venir!)
- 1 calabaza
- 500g carne picada (yo usé ternera)
- 1 cebolla grande o 2 pequeñas
- 1 diente de ajo
- sal y pimienta
- sumac
- pimentón dulce
- romero, salbia otra hierba que os apetezca
- queso rallado
- Lavar la calabaza y partir por la mitad. Asar en el horno a 200º durante una hora, o hasta que un tenedor pueda atravesar la carne sin resistencia. Dejar enfriar.
- Cortar la cebolla finamente y caramelizar.
- En una sartén con un poco de aceite, dorar el ajo y sacar antes de que se queme. Esto le dará sabor sin resultar abrumador.
- Añadir la carne a la cebolla y espolvorear sumac y pimentón, salpimentar al gusto y cocinar al punto. Si no os gusta la carne medio hecha no os preocupéis, una vez en el horno seguirá cocinándose!
- Tomar las mitades de la calabaza y vaciar para formar «barquitos». Añadir la carne de la calabaza a la mezcla de carne y cebolla y mezclar bien.
- Con una cuchara grande rellenar las mitades de la calabaza con la mezcla, y servir queso por encima. Meter en el horno 10-15 a 200º, y a comer!
CONSEJOS DE PROPINA:
- Hay una gran variedad de quesos que combinan con esta receta para darle un toque diferente: gouda, mozzarella, cheddar, feta, old Amsterdam…
- Lo mismo con las especias y hierbas: salvia y romero son mis favoritas para esta receta, el orégano le va muy bien y también el comino y la canela.
- También podéis añadir dos cucharaditas de azúcar moreno a la cebolla mientras se carameliza. Le dará un contraste de sabores único!